Imperdibles de Roma
Roma pese a ser una ciudad pequeña, comparada con las grandes Barcelona o París, no deja de ser poca cosa. Visitarla te llevará un tiempo, varios días, y es que en Roma tiene una concentración altísima de patrimonios, de iglesias, de monumentos, de arte, mucho arte. El museo al aire libre le dicen, y es que pasearas por calles históricas, que datan desde cientos de años, miles quizás, ruinas que se mantienen en pie desde los años antes de cristo, e iglesias gigantescas, mostrando el gran poder que alcanzó el cristianismo.
Esta pretende ser una guía de 15 lugares que ver en Roma, tendrás plazas, ruinas, iglesias, museos, incluso una maravilla del mundo. Úsala para tu próximo viaje, e intenta agruparlas en tu itinerario, para hacer rendir al máximo los días.
Coliseo Romano
No podíamos no empezar con una de las principales atracciones de toda Italia, el Coliseo Romano, que hoy en día es una de las nuevas siete maravillas del mundo. El coliseo es una de las obras monumentales del antiguo Imperio Romano, y una de las pocas que quedan aún de pie, llevando casi 2000 años así, y si, ha sufrido algunos cuantos golpes, gracias a terremotos y al desuso en el periodo medieval, como esa gran parte de lo más alto de la muralla de su fachada
Su nombre real es el Anfiteatro Flavio, y lo conocemos con el nombre de Coliseo gracias a una estatua en una de sus entradas, conocida como el coloso de Neron, que actualmente no existe. Su función fue el de entretenimiento, donde los gladiadores luchaban entre ellos, o contra animales de gran envergadura, incluso en su momento de apogeo lo llenaron de agua para la realización de combates navales.
Si es que estás en Roma, anda y paseate por el Coliseo, es literalmente uno de los indispensables de toda Europa. Para entrar, debes reservar la entrada con anticipación (repito, principal monumento de Italia) y decidir a qué parte quieres entrar, si al segundo piso, tercer piso, las arenas o el subterráneo, según eso, el precio va a variar. Por fuera, busca las fotos en su entrada, en la zona que está cercana al Arco de Constantino, y luego sube las escalinatas de la colina que dan hacia la via Nicola Salvi, y tendrás unas fotos increibles.
Foro Romano
Los foros eran la unidad básica de la ciudad en la Roma antigua, algo parecido a una plaza de hoy en día, allí, se podía encontrar la administración de gobierno y justicia, edificios asociados a la religión, el mercado. El foro Romano era el principal, pero a sus lados podrás encontrar otros más, como el de Augusto y el de César.
Al ser construidos sobre un terreno pantanoso, con el tiempo se fue cubriendo cada vez más y más de escombro y barro, haciendo que hoy solo tengamos unos cuantos restos de lo que alguna vez fue el centro de uno de los imperios más grandes del mundo.
Para verlo, tienes dos formas, la forma pagada, en donde usas la misma entrada del Coliseo, que permite entrar al Foro y ver sus ruinas desde muy cerca. La otra forma es gratuita, y es que el Foro está expuesto, al aire libre, por lo que si paseas por algunas calles o plazas, podrás ver una que otra ruina, las más comunes son la vía del Fori Imperiali, la calle que une el monumento a Vittorio Emanuelle II y termina en el Coliseo, y la otra es la plaza del Campidoglio, donde las fotos te saldrán magistrales.
Fontana di Trevi
Esta es una de las fuentes más conocidas de Roma, la más popular, y una de las principales atracciones que miles y miles visitan en la ciudad, la Fontana di Trevi. Con sus casi 40 metros de fachada, esta fuente es una belleza, con una expresión artística del Barroco Italiano, y su escultura principal de Neptuno, el dios del Océano. Pese a que desde el siglo I a.c. ya existía una especie de fuente, con el final de un acueducto, la fuente como tal fue obra de Nicola Salvi, y terminada por los años 1700 bajo órdenes del Vaticano, de hecho, aún puedes ver el escudo de la Santa Sede.
La leyenda cuenta que si te sientas en su borde, y lanzas una moneda con tu brazo derecho al agua por sobre tu hombro izquierdo, volverás a Roma, alguna vez en tu vida. El mejor tips que te podrían dar, es ir temprano, la fuente se llena de gente, y la aglomeración no permite ver todos sus detalles, y menos sentarte a lanzar la moneda, así que es mejor madrugar un poco, y tendrás la vista privilegiada y sin tanta gent
Plaza del Campidoglio
La piazza del Campidoglio es la que corona la cima de la colina capitolina, que pasó de estar abandonada post imperio, a ser una de las plazas más destacadas y llamativas de la ciudad. Su fama se debe a que en ella está el Tabulario, un edificio romano antiguo, que servía para el almacenamiento y conservación de leyes, decretos, documentos.
Eso sí, la forma actual es netamente obra de Michelangelo, ya que fue a este artista que se le dio la tarea de organizar y diseñar la plaza por los años 1500 ‘s. Michelangelo dirigió la orientación hacia el Vaticano, el nuevo centro de la ciudad y agregó todas las estatuas del lugar, como la de Marco Aurelio a caballo en el centro.
Lo importante, ir al Campidoglio es gratis, solo debes subir a la colina, y además de su plaza y detalles, tendrás vistas increíbles al Foro Romano. También están los Museos Capitolinos, el museo más antiguo e importante de Roma.
Capilla Sixtina
La Capilla Sixtina debe ser el edificio más famoso del Vaticano, y es que aquí, es donde ocurre el cónclave papal, ocasión donde se elige al nuevo Pontífice de la Santa Sede. Durante todo el proceso, que puede tardar días, los cardenales se reúnen a puerta cerrada para votar a su nuevo líder.
Ahora, para los turistas es imposible entrar en alguna de estas ocasiones, pero sí a ver una de las obras más notables del arte, los frescos de Michelangelo. Por ahí por los años iniciales del 1500’ el papa de ese entonces encargó a Michelangelo a decorar la Bóveda de la Capilla, y vaya que trabajo hizo, el más reconocido, es el llamado La Creación de Adán, ese donde Adan y Dios estan a punto de tocarse la punta de los dedos.
Para entrar, tienes que comprar el ticket a los Museos Vaticanos, este incluye la Capilla. Tendrás que hacer toda una caminata por casi todo el arte del museo antes de llegar, que a decir verdad, no es de lo mejor que encontrarás en Roma. Recuerda que debes reservar con anticipación, para ahorrar la fila de entrada, además de que te pedirán vestir de forma “adecuada”, sin mostrar ni rodillas ni hombros, y tampoco usar gorras. Otra cosa más, y lo más triste quizá, las fotos están prohibidas.
Basílica de San Pedro
La basílica más importante y el corazón de la iglesia católica, que según la tradición cristiana, es la tumba de San Pedro, uno de los 12 apóstoles de Jesus. Destaca por tener el espacio interior más grande de una iglesia, creeme que lo notaras al entrar, y es que verla desde adentro te dirá cuán notable y cuánto poder alcanzó la iglesia católica por esos años.
Pese a todo pronóstico, entrar a la Basílica es gratis, lo único que tienes que hacer es formarte en una fila, pasar por seguridad, y entrar. Incluso puedes ir a la cripta en donde están las tumbas de los antiguos papas. Ojo, que las filas son largas, así que la mejor recomendación es que llegues temprano, y aun así, tendrás fila. Considera que en temporada alta estará aún más lleno, pero en promedio no deberías esperar más de 30 minutos en todo el proceso. Por lo único que podrías pagar es por subir la cúpula, ya que esta es un mirador de Roma, y uno de los mejores, ya que la iglesia es el punto más alto de la ciudad.
Por último, el Vaticano pide que para entrar estés vestido “acorde”, que para ellos quiere decir que no muestres los hombros, y no uses short por sobre la rodilla.
Panteón Romano
El panteón es una de las reliquias de la cultura romana, justo al medio de la actual capital de Italia, y uno de los mejores edificios conservados. Su nombre completo es Panteon de Agripa, ya que fue Marco Agripa el que mandó a construir el templo por los años en donde Roma era el estado más poderoso del mundo. El punto es que en algún momento de la historia fue destruido, quién sabe porqué, y el que ves actualmente en Roma, es uno edificado por Adriano, y que tuvo la deferencia de dejar la misma inscripción original.
Lo mejor, entrar y ver su magnífico interior es gratis. Solo debes hacer la fila, y nada más, nada de reservas, nada de pagos. Recomiendo que vayas por la mañana, ya que así la fila será algo más pequeña, y además, te ahorras el calor intenso del mediodía. Las fotos desde su plaza también quedan geniales, solo que lo mismo, anda temprano, porque es uno de los puntos más visitados de Roma.
Piazza del Popolo
Otra de las plazas populares de Roma, la Piazza del Popolo, o en español, la plaza del pueblo. Llamada así, porque en su tiempo, los años 1500 ‘s, este era la puerta de entrada a la ciudad, siendo un espacio de invitación hacia el pueblo. Está ubicada muy cerca de la Plaza España, así que en tu itinerario calzaran para el mismo día.
Aprovecha de ver las iglesias gemelas, diseñadas (en parte) por Bernini. También la iglesia Santa María del Popolo, donde trabajaron varios arquitectos de renombre, como el mismo Bernini, y Rafael. Por último, y lo que más destaca de la plaza, es su obelisco, traído directamente desde Egipto por Augusto.
Piazza Navona
Y es que Roma aparte de cultura, es una ciudad llena de plazas, la plaza Navona es otra de las tantas, que reúne varios monumentos, estatuas, arte, y obvio, su iglesia. Antiguamente, en la época Romana, servía como estadio, específicamente el Stadium Domiciano, eso sí, este tipo de estadio era alargado, de ahí la forma actual de la plaza, un óvalo largo y angosto.
No te pierdas sus fuentes, son tres, dos en cada extremo, y otra en el centro, esta última es la que más destaca, fue hecha por Gianlorenzo Bernini, y lleva el nombre de Fuente de los Cuatro Ríos, ya que busca representar los cuatro ríos más importantes del mundo conocido, el Ganges, Danubio, Nilo y el Río de la Plata. Además, está coronada por un obelisco, mandado a construir por el mismo Domiciano a Egipto.
Plaza España
Una de las tantas plazas de Roma es la de España, que lleva el nombre de ese país ya que alberga la embajada de España (muy original, no) Y como buena plaza, es totalmente gratis pasear por allí. El punto más turístico son sus escaleras, que ascienden hasta la Iglesia Trinita dei Monti, que se hicieron conocidas gracias a las películas que han usado Roma como locación.
Durante la primavera y verano, las escaleras las tiñen con grandes adornos florales, que hacen que su esencia sea muchoooo mejor, es más, este debe ser uno de los puntos en donde más fotos se sacan los turistas, por lo que verla vacía será una misión difícil.
Las últimas noticias es que Roma prohibió sentarse en las escalinatas. De todas formas, hay todavía mucha gente sentada tomándose fotos, pero si te levantan, o te multan, estas mas que avisado.
Castillo Sant’Angelo
Uno de los monumentos más bonitos de la ciudad de Roma, que en un principio fue pensado como el mausoleo del emperador Romano Adriano, sin embargo, la historia nos dice que fue usado como edificio militar. El castillo está muy cerca del Vaticano, en la orilla del río Tíber, de hecho, está conectado a él, por un paso fortificado, llamado Passeto di Borgo que sirvió como una ruta de escape a los papas durante los asedios en Roma.
Para entrar tienes que pagar un ticket de $15 euros, y puedes comprar directamente en la taquilla, ya que no es de las atracciones más populares de la ciudad. Ahora bien, el puente que llega a él, llamado también Sant’angelo, tiene la mejor vista al castillo, y las fotos salen de lujo. Para mi esa vista y esa foto ya es más que suficiente, eso sí, recuerda ir un poco más temprano, ya que es uno de los spot preferidos de los fotógrafos.
Barrio del Trastevere
El Trastevere más que un monumento, es un barrio completo, uno de los con más historias de Roma. Es un barrio que está a la orilla del río Tíber, hacia su lado poniente, bien cercano al Vaticano. Con calles adoquinadas, y edificios y casas de estilo más medieval, que cobra mucha fama e importancia después de la segunda guerra mundial, por sus calles muy estrechas, serpenteantes, ocultas, y su variada cantidad de bares.
Hoy es uno de los barrios más cosmopolitas, con mucho turista, mucha cultura y mucha vida de barrio, sin jamás perder su esencia italiana. La gran mayoría viene aca en búsqueda de lo bohemio, en busca de los múltiples bares, pubs, restaurantes de distinta gastronomía, desde el italiano más clásico, hasta lo mexicano o japonés. Y pese a que la gente viene solo por lo cultural, también hay algunos monumentos que destacan, sus plazas, sus iglesias, o el palacio Corsini son de los varios edificios mega históricos que rescatar de la zona
Plaza Venecia
Y así como el Campidoglio es la cima de la colina capitolina, la Piazza Venecia son los pies. Aquí se cruzan calles de gran envergadura, una de ellas es la de los Foros Imperiales, que ya conocemos su importancia y belleza.
Lo que destaca de esta plaza es el monumento que está presente en ella, el monumento a Vittorio Emmanuelle II, el primer rey de Italia. En sus inicios tuvo muchos detractores, ya que destruyó gran parte de la colina capitolina, y eliminó por completo un barrio medieval, pero hoy en día es uno de los grandes monumentos de Roma, y uno de los más visitados.
Entrar te saldrá totalmente gratis, ahora si quieres subir a la terraza, el precio es de $10 euros (gratis para los menores de 18 años), y puedes comprarlo directamente en el lugar. La terraza te servirá como mirador de la ciudad, con vistas hacia el Colosseo y hacia el Foro Romano.
Villa Borghese
Y si creías que Roma sólo era una ciudad de grandes monumentos y bellas iglesias, pues no, también hay parques. La Villa Borghese es uno de los principales parques públicos de la ciudad, y uno de los más grandes también, data los años 1600 ‘s, pero su existencia va mucho más atrás, de hecho en la época del imperio Romano, ya se hablaba de la existencia de unos jardines.
Para ingresar tienes muchísimos puntos, pero los más populares son los que están por la Piazza España, subes su escalinata, y empiezas la travesía. Llegarás a un mirador increíble hacia la Piazza del Popolo, con vistas hacia la cúpula de la Basílica San Pedro. Ya dentro del parque, tienes la posibilidad de disfrutar sus extensas áreas verdes, hacer un picnic, y recorrer su laguna con su edificio más famoso, la Galería Borghese, hogar de obras hechas por Bernini, Rafael y Leonardo DaVinci.
Museos Capitolinos
Es el principal museo de Roma, y puede que te imagines que son varios, pero en verdad es solo uno, y mantiene el nombre “museos”, en plural, gracias al origen de su nombre, que eran colecciones.
El museo se ubica en la plaza del Campidoglio, en la colina capitolina, y dentro de él, podrás ver La Loba Capitolina, que es la loba que alimentó a Romulo y Remo. También está la Venus Capitolina, y restos de esculturas colosales de la antigua Roma. Por último, no dejes de ver las vistas hacia el Foro Romano, que son una de las mejores que podrás obtener.
El sitio oficial para comprar la entrada es: https://www.museicapitolini.org/es, pero a decir verdad, no es necesario reservar con mucha anticipación, es más, incluso puedes comprarlas el mismo día. La entrada tiene un precio de $15 euros, pero si tienes menos de 25 años o más de 65 años, te hacen un descuento de $2 euros.